Desde 2020, el concepto de espacios de trabajo ha evolucionado significativamente. Las principales fuerzas impulsoras de este cambio son la demanda de mayor flexibilidad y la reducción de las horas de desplazamiento.
Los empleadores se enfrentan ahora a un nuevo desafío: maximizar la productividad y, al mismo tiempo, rediseñar los entornos de trabajo para beneficiar a las empresas y a los empleados.
Para abordar estos desafíos, JLL entrevistó a 208 tomadores de decisiones globales del sector inmobiliario comercial y realizó una encuesta de un año de duración en la que participaron 20.121 trabajadores de oficina. Los resultados se detallan en el informe “¿Está funcionando realmente el modelo híbrido?“, que ofrece información valiosa para las empresas que se enfrentan a la dinámica cambiante de los espacios de trabajo y los modelos de trabajo híbridos.