El 10 de noviembre, Apple presentó su nuevo Sistema M1 en un chip. Un procesador tan rápido y tan abstemio en su consumo de energía, que ha hecho explotar la industria de las computadoras portátiles. El nuevo MacBook Air, de US$ 999 es tan rápido como un MacBook Pro, de US$ 6.000, de hace 3 años. Y este es el procesador de nivel de entrada. Durante los próximos dos años, se desarrollarán versiones más grandes y potentes para alimentar toda la gama de computadoras de Apple.
Y con esto, la era de la informática basada en Intel llegará a su fin. Por supuesto, Intel seguirá siendo una gran empresa en los próximos años, pero su dominio ha sido erradicado, así como así. Como ha escrito John Gruber, comentarista de tecnología, “Las Mac M1 son máquinas superiores a sus predecesoras basadas en Intel, tanto que es difícil de creer”.
Durante el mismo mes, hemos visto el anuncio de no una, sino de tres nuevas vacunas para contrarrestar el Covid-19. Cada una se desarrolló en menos de un año, una hazaña de extraordinaria brillantez, ya que la norma para el desarrollo de vacunas se mide en décadas, no en años.
Antony Slumbers (Reino Unido)
Orador, asesor y escritor mundialmente reconocido en tecnología proptech y del espacio como servicio. Como emprendedor en serie, fundó y salió de varias compañías de software proptech. Ahora es consultor sobre sus estrategias de transformación, tecnología e innovación para empresas inmobiliarias. Escribe en su blog antonyslumbers.com y es un prolífico tweeter (@antonyslumbers).